TODOS FRENTE A LAS OBRAS EL LUNES A LAS 9 DE LA MAÑANA
Los poderes siempre tienen a alguien que se ocupe de hacer el trabajo sucio. La Consejerísima tiene al mariscal Bonifacio y éste parece tener a un nuevo jefe de obras que hoy presentamos en contra de nuestro deseo y gusto estético. Es un mastín. El anterior no ha querido someterse al juicio de los padres y niños tal vez por dignidad o vergüenza, y es que hay hombres que no están dispuestos a sacrificar su dignidad por un poco de dinero, de prestigio o poder. Cualquier posible parentesco de este perfil sicológico con el mariscal es pura coincidencia. Bueno, resumiendo. Hoy me acerqué a hacer unas fotos del desarrollo de las obras (también "hacer obras" significa hacer caca), disculpen lo soez que puede sonar la expresión y sobre todo si hiero la sensibilidad de algún lector. Pues, eso, que hoy me acerqué y mientras hacía fotos al montaje de la caca que nos ponen en el patio, se acercó un mastín lanzando improperios, yo estaba en la cerca del patio, fuera del recinto amurallado, o sea, fuera de la juridicción del mastín, y casi caigo con la cámara a causa de lo precario de mi equilibrio. Me increpó de varias maneras, pero resumo:
--Mastín: ¡No me puede hacer fotos!
--Yo: No le hago fotos a usted, sino a las obras.
--Mastín: ¡La obra soy yo!
--Yo: Vale
Entonces encuadré y salió este rostro anodino, de cuello ancho, frente estrecha, mandíbulas de depredador y mirada torva. Tengo la secuencia completa pero no pienso seguir hiriendo a los lectores.
A los padres que se acerquen por curiosidad les aconsejo que tengan cuidado, hay un mastín que cuida la manera de "hacer obras" de las autoridades de la Comunidad de Madrid. Un mastín que con ínfulas de poder, como los otros, reta como parodia a Luis XIV cuando dijo, "L'État, c'est moi" ("El Estado soy yo"). Los otros, los jefes, parecen creer los mismo, pensarán: "La educación soy yo", "La Comunidad de Madrid soy yo". Les aviso que el lunes cuando asistamos a protestar por el comienzo de las obras lo tendrán allí suelto, buscando el cuello de alguna víctima, dando vueltas en lo que él cree su predio, que es en realidad el patio de nuestros hijos. Lo peor de todo es que este señor puede que también tenga hijos a los que le lleva la comida que le ofrecen sus dueños, y eso es loable, pero, por favor, que no se meta con nosotros porque siempre hemos respetado a los trabajadores que no tienen la culpa. Nunca hemos criticado o manifestado acritud contra los trabajadores de las obras, ahora bien, que este señor mastín no nos impida protestar y testimoniar pacífica y democráticamente por nuestros derechos. Que no se oponga a la libertad de expresión ni a la libertad de querer lo mejor para nuestros hijos, ¡faltaría más! Lamento haber dedicado tiempo a quien no lo merece, si no fuera porque es una evidencia más de todo lo que denunciamos. Lo siento, tengo pendiente hablar de cosas más relevantes que intentaré abordar esta noche.
TODOS EL LUNES A LAS 9 DE LA MAÑANA FRENTE A LAS OBRAS
Los poderes siempre tienen a alguien que se ocupe de hacer el trabajo sucio. La Consejerísima tiene al mariscal Bonifacio y éste parece tener a un nuevo jefe de obras que hoy presentamos en contra de nuestro deseo y gusto estético. Es un mastín. El anterior no ha querido someterse al juicio de los padres y niños tal vez por dignidad o vergüenza, y es que hay hombres que no están dispuestos a sacrificar su dignidad por un poco de dinero, de prestigio o poder. Cualquier posible parentesco de este perfil sicológico con el mariscal es pura coincidencia. Bueno, resumiendo. Hoy me acerqué a hacer unas fotos del desarrollo de las obras (también "hacer obras" significa hacer caca), disculpen lo soez que puede sonar la expresión y sobre todo si hiero la sensibilidad de algún lector. Pues, eso, que hoy me acerqué y mientras hacía fotos al montaje de la caca que nos ponen en el patio, se acercó un mastín lanzando improperios, yo estaba en la cerca del patio, fuera del recinto amurallado, o sea, fuera de la juridicción del mastín, y casi caigo con la cámara a causa de lo precario de mi equilibrio. Me increpó de varias maneras, pero resumo:
--Mastín: ¡No me puede hacer fotos!
--Yo: No le hago fotos a usted, sino a las obras.
--Mastín: ¡La obra soy yo!
--Yo: Vale
Entonces encuadré y salió este rostro anodino, de cuello ancho, frente estrecha, mandíbulas de depredador y mirada torva. Tengo la secuencia completa pero no pienso seguir hiriendo a los lectores.
A los padres que se acerquen por curiosidad les aconsejo que tengan cuidado, hay un mastín que cuida la manera de "hacer obras" de las autoridades de la Comunidad de Madrid. Un mastín que con ínfulas de poder, como los otros, reta como parodia a Luis XIV cuando dijo, "L'État, c'est moi" ("El Estado soy yo"). Los otros, los jefes, parecen creer los mismo, pensarán: "La educación soy yo", "La Comunidad de Madrid soy yo". Les aviso que el lunes cuando asistamos a protestar por el comienzo de las obras lo tendrán allí suelto, buscando el cuello de alguna víctima, dando vueltas en lo que él cree su predio, que es en realidad el patio de nuestros hijos. Lo peor de todo es que este señor puede que también tenga hijos a los que le lleva la comida que le ofrecen sus dueños, y eso es loable, pero, por favor, que no se meta con nosotros porque siempre hemos respetado a los trabajadores que no tienen la culpa. Nunca hemos criticado o manifestado acritud contra los trabajadores de las obras, ahora bien, que este señor mastín no nos impida protestar y testimoniar pacífica y democráticamente por nuestros derechos. Que no se oponga a la libertad de expresión ni a la libertad de querer lo mejor para nuestros hijos, ¡faltaría más! Lamento haber dedicado tiempo a quien no lo merece, si no fuera porque es una evidencia más de todo lo que denunciamos. Lo siento, tengo pendiente hablar de cosas más relevantes que intentaré abordar esta noche.
TODOS EL LUNES A LAS 9 DE LA MAÑANA FRENTE A LAS OBRAS
La próxima vez, querido amigo, vete vacunado contra la rabia, el moquillo, la lehismaniosis y demás, no siendo que el cancerbero del Sr. Bonifacio te salte a las canillas. Por cierto, ¿no tendría que ir con bozal y atado, bien atado?, creo que sí. Será motivo de denuncia, seguro.
ResponderEliminar"La obra soy yo", ¿quien dijo eso de la Justicia soy yo?, ¡ah!, Charles Bronson, ya tenemos nuestro "Charles B" del ladrillo y el hormigón. El lunes le haré una visita, llevaré Dog Chow para carmarle.
Me parece estupendo lo que estáis haciendo con este Blog. De verdad que si. Pero este último post, tildando a esta persona (el jefe de obra) como Mastín hace que te acabes de poner a su misma altura. La verdad es que he leído bastante demagogia en tus posts, pero esto último no me lo hubiese esperado.
ResponderEliminarAún así, te felicito por la labor que estás haciendo y te animo a que continues, pero por favor predica con el ejemplo y deja la saña y las descalificaciones para otros lugares.
Un saludo
¡viva el sentido del humor! felicidades al creador de este blog y ya sabes que ¡hay gente pa tó! sigue con ese toque irónico que a mí particularmente me encanta y además le has dado mucha categoría a ese hombre llamándole mastín pq yo creo que más bien es un chucho sin pedigrí y que no se me ofenda ningún chucho.
ResponderEliminarNo hagas caso a quien te llama demagogo y encima te dice que descalificas.
ResponderEliminarA lo mejor el que esta a su altura es el.
Sigue asi, el blog es estupendo y muy trabajado.
Por encima de la supuesta "demagogia" que dices que tiene el autor del blog está el esfuerzo, dedicación y empeño que este Señor dedica día a día para intentar que las condiciones en las que nuestros hijos reciben su educación no se degraden. Y desde luego está muy por encima de aquéllos conformistas, pasotas, derrotistas y demás, que para hacer colas de horas para pedir lo gratuito (bebidas, bocadillos, actividades, etc) si tienen tiempo, pero no para impedir que estropeeen un poco o bastante más el colegio.
ResponderEliminar@ Anónimo de las 12:20:
ResponderEliminarTotalmente de acuerdo. Por eso mismo primero felicité al autor de este blog y finalicé animándolo a que siguiera haciéndolo como hasta ahora.
No sólo vale leer entre líneas ya que eso es hasta cierto punto demagogia.
Tranquilidad al personal. Recordemos para qué es todo esto y quienes son nuestros contrarios. De nada sirve juzgar al vecino ni ofender a otros padres. Aunque hay que saber encajar la crítica si está argumentada.
ResponderEliminarSaludos al autor del blog.
Reflexiones de ayer y de hoy....
ResponderEliminarPapá del Tirso dice:
ResponderEliminarTe pediría,representante parcial de los padres de los alumnos del Tirso de molina, que dejaras tu ideología politica a un lado porque se te ve un plumero que no limpia bien el polvo. Creo que te sobra demasiado tiempo y tus hijos están aprendiendo demasiada informatica a nivel ideario.
Creo que los padres deberíamos preocuparnos no solo porque nos resten espacio común de un patio sino porque no se limite la capacidad de aprendizaje en las aulas.
¿Por qué digo esto?...¡Muy sencillo!
Nuestros hijos, cuando son pequeños, vienen a ser como esponjas que son capaces de aprender aquello que no está marcado en los objetivos de una programación mediocre y que algunas profesoras se limitan a seguir al pie de la letra porque ir más allá, supone y requiere dar más de si y ponerle ganas a esto que llaman educación y que es tarea de todos: de los padres y de los profesores.
Muchos de los padres del Tirso, parece que solo se ven afectados por un problema de espacio y tiempo; por la incursión de setenta y cinco niños que, parece ser, debieran estudiar en Ávila, por lo menos, para salvaguardar la integridad de los metros.
Preocupémosnos por la educación que se da en las clases, por la educación en contra de un sistema, que agrupa a determinadas profesoras del colegio,que no abogan por la diversidad porque ésta obliga a esforzarse más, a buscar nuevos metodos e instrumentos de trabajo que facilite el aprendizaje.
Nuestros hijos deben aprender jugando, sobre todo cuando son pequeños;el profesor debe ser delicado y estar dedicado a ellos; no puede huir de los alumnos diferentes y velar solo por la salud de unos pequeños que tienden en las escuelas a ser intimistas, protegidos, sumisos y aprendiendo la palabra castigo como término inicial de referencia.
Los profesores deben transmitir ilusión y buscarse la vida, como lo hacemos los demás,para conseguir retos y hacer partícipe a todos los niños sin excluir a nadie por ser distinto a la minoría.
Durante cierto tiempo los niños deben ser niños y no les estamos dejando crecer a su ritmo,no les están dejando madurar y quieren recolectar la cosecha antes de tiempo.
¿Por qué, dueño de este blog, no hace ningun comentario acerca de cómo es la educación actual en el Tirso? ¿Se ha dedicado a hacer alguna encuesta de si los niños de cinco años, pasan a primero de Primaria con los deberes hechos o quizá sean los profesores de Primaria los que tengan que dar dos cursos en uno? Lo digo porque mi sobrina que ha terminado tercero de infantil aún no ha aprendido a leer y mi hija que ha terminado Primero, sí lo hizo.
¿Nos hemos preocupado antes, o nos hemos quejado de la ubicación de los niños de cinco años en un pabellón que no les corresponde por ley y altura? ¿Nos hemos quejado del gran poder de las profesoras del colegio que han impedido que se pueda realizar el campamento de verano en septiembre? ¿Felicitamos al Ampa de vez en cuando por lo bien que organiza el tema de las extraescolares y hablamos de ello?
Maestro es el que educa y enseña; el que con entrega fascina a sus alumnos y les atrae en su forma de enseñar.El que quiere a sus niños y les coge cariño, el que lucha porque todos salgan adelante y no discrimina a ninguno. Aquel que siempre tiene una palabra mágica que nombrar y se entrega a su trabajo, con vocación y entusiasmo.
Aparte de los metros que van a desaparecer creo que es más productivo preocuparse por lo que no se hace en el aula y por obligar, a ciertas maestras, a ejercer su trabajo en condiciones tras obligarlas a hacerse un examen moral, ético y profesional. Si se ha perdido el interés...comisión doméstica, a ser franca, y a casa.